Mediante el decreto 872/18, el presidente Mauricio Macri licitó áreas petroleríferas en la sección austral del Atlántico sur, en la modalidad Off Shore (fuera de costa). Dentro de las particularidades de esta licitación se encuentran la prorroga jurisdiccional a favor de tribunales norteamericanos y el acceso de empresas inglesas a la explotación de zonas aledañas a las islas Malvinas.
La prórroga de jurisdicción de las 38 áreas licitadas implica que todo litigio que se suscite respecto de estas explotaciones serán resueltas judicialmente por tribunales de otro país y sin posibilidad de intervención de tribunales argentinos.
Por otra parte, una de las tres cuencas licitadas corresponde a la cuenca Malvina oeste, emplazada en dicha zona aledaña a las islas. En tal sentido, se trata de un espacio de importancia estratégica en la “cuestión Malvinas” que ha sido cedido a concesionarias inglesas, con todo lo que ello implica respecto del desarrollo logístico que tales emprendimientos conllevan. Así las cosas, el movimiento de buques y demás medios de transporte de bandera británica contarán con un plácido argumento para merodear la zona del conflicto soberano, incluyendo amplias zonas del mar argentino.
Por otra parte, el Presidente Macri entregó a las concesionarias toda la información de exploración disponible gratis (2D, 3D y pozos del Offshore), lo que implica una enorme ventaja en favor de estas empresas, toda vez que la exploración resulta uno de los costos de inversión más importantes para este tipo de emprendimientos. A la par, se sabe que la cuenca Malvina Oeste está conectada con la cuenca Malvinas y se estima que también podría estarlo con la cuenca Austral Marina, lo que implicaría que las concesionaria Tullow Oil tendría acceso a la explotación de tales recursos de manera ilegítima durante treinta años.
Tullow Oil es una empresa hidrocarburífera de origen británico, especializada en exploración y explotación en el offshore. Cuenta con 87 licencias otorgadas en 17 países mayormente ubicados en África.
Al conocerse el Decreto 872, el Observatorio de Malvinas advirtió sobre la grave afrenta a la seguridad nacional que implicaría la adjudicación a petroleras británicas de áreas en la Cuenca Malvinas Oeste, a una distancia aproximada de 100-150 kilómetros de las islas y a más o menos la misma distancia de la zona en actual exploración en la Cuenca Malvinas Norte por parte del consorcio entre Rockhopper y Premier (ambas británicas). No nos equivocamos en la advertencia, señalaron fuentes del observatorio.
Tampoco se prohíbe que las empresas adjudicatarias -más aún si son oriundas del Reino Unido- puedan utilizar o promover la construcción de las instalaciones portuarias en Puerto Argentino para la exportación de crudo empleando como plataforma a las islas, tal y como está pensado para el crudo extraído de la Cuenca Malvinas Norte.
Fuente: El destapeweb.com