El exministro de Economía alertó sobre los riesgos de utilizar fondos del organismo para intervenir en el mercado cambiario. Sostiene que esta estrategia podría comprometer la estabilidad del peso y el proceso de desinflación.
El exministro de Economía, Domingo Cavallo, volvió a expresar críticas severas contra la política cambiaria del Gobierno. En esta oportunidad, advirtió que si los dólares provenientes del Fondo Monetario Internacional (FMI) se destinan a intervenir en el valor de la divisa, el proceso de desinflación podría verse amenazado. Esta última ha sido una de las principales banderas del actual gobierno libertario.
Días atrás, el ministro de Economía, Luis Caputo, confirmó que Argentina solicitó un préstamo de 20.000 millones de dólares al FMI en el marco de un nuevo acuerdo de Facilidades Extendidas (EFF), cuya aprobación aún depende del directorio del organismo. Sin embargo, aún no se han esclarecido cuántos de esos fondos estarán disponibles sin restricciones ni si habrá modificaciones en la estrategia de control del tipo de cambio.
En este contexto, Cavallo, quien alguna vez fue elogiado por el presidente Javier Milei como «el mejor ministro de la historia», alertó sobre el impacto negativo de utilizar reservas obtenidas a través de organismos financieros internacionales para intervenir en el mercado cambiario. «Pensar en el uso de las reservas externas para inducir o mantener una apreciación exagerada del peso es contraproducente y puede derivar en el fracaso del proceso de desinflación», remarcó el economista a través de un artículo en su blog personal.
El exfuncionario de los gobiernos de Carlos Menem y Fernando de la Rúa también cuestionó la continuidad del esquema cambiario actual y el uso de reservas que, según él, pertenecen a los depositantes de dólares en el sistema bancario. En su opinión, destinar estos fondos para intervenir en el mercado oficial y en los mercados financieros paralelos, como el contado con liquidación (CCL) y el mercado electrónico de pagos (MEP), no contribuirá a consolidar la estabilidad de precios.
La postura del FMI y la posibilidad de cambios en la política cambiaria
Cabe recordar que la utilización de reservas para regular la cotización del dólar en los mercados financieros informales ha sido históricamente criticada por el FMI. En las últimas semanas, crecieron las especulaciones sobre la posibilidad de que el nuevo acuerdo con el organismo incluya una solicitud explícita para modificar la estrategia de control artificial del tipo de cambio.
Diferencias entre la Convertibilidad de los 90 y el esquema actual
Cavallo también instó al Gobierno a brindar mayores precisiones sobre la transición hacia un régimen de mercado único y libre de cambios con competencia de monedas. Si bien reconoció que su gestión en los años 90 también experimentó una apreciación del tipo de cambio, subrayó diferencias clave con el Plan de Convertibilidad.
Según el economista, la estrategia actual se basa en la evidencia histórica de que los planes de estabilización exitosos han incluido una fase inicial de tipo de cambio fijo, acompañada de un ajuste fiscal y monetario. Bajo este enfoque, el equilibrio en las cuentas externas se alcanzaría mediante la estabilidad fiscal y monetaria, además de un aumento de exportaciones en sectores estratégicos como la minería y la energía.
Sin embargo, Cavallo destacó que en la Convertibilidad «el tipo de cambio que se fijó era único, los mecanismos de diferenciación cambiaria como retenciones a las exportaciones y elevados aranceles de importación fueron eliminados de inmediato y se garantizaba total libertad en la movilidad de capitales». Esta característica del plan de los 90 permitió no solo estabilizar expectativas y frenar la inercia inflacionaria, sino también propiciar una fuerte entrada de divisas al sistema financiero formal, ya sea a través de depósitos en dólares o mediante la conversión de divisas en pesos en el Banco Central.
En contraste, el modelo actual «sigue requiriendo el uso de reservas limitadas del Banco Central y se fundamenta en un tipo de cambio que no es ni único ni completamente libre». Cavallo advirtió que si el Gobierno insiste en la idea de que cualquier movimiento abrupto en el tipo de cambio podría desencadenar una hiperinflación, «entonces la lucha contra la inflación estará en peligro».
