En un partido magistral, el equipo de Claudio Ubeda despliega un fútbol contundente y se impone por un claro 5-0 ante Newell’s, encabezando la Zona A del torneo Clausura.
La Conducción de Ubeda Impone un Rumbo Firme en Boca
La salud del director técnico Miguel Russo continúa en un estado delicado, sin mostrar señales de recuperación en el corto plazo. En este contexto de incertidumbre, Claudio Ubeda ha tomado las riendas del equipo y, según informaciones internas, permanecerá al mando hasta fin de año. Los directivos del club esperarán hasta entonces para evaluar la situación definitiva del entrenador, en caso de que Russo no logre reintegrarse.
Tras una primera presentación en solitario que culminó con una derrota ante Defensa y Justicia, Ubeda enfrentó un nuevo desafío frente a Newell’s, con la posibilidad de que el equipo alcanzara la cima de su grupo, dependiendo de otros resultados.
La estrategia diseñada por Ubeda buscó un dominio absoluto desde el inicio, evitando cometer los mismos errores que en el encuentro anterior. Leandro Paredes se erigió como el eje central del equipo, siendo el principal organizador del juego ofensivo. El campeón del mundo contó con un sólido respaldo de Battaglia y Aguirre en el mediocampo, quienes facilitaron las tareas de recuperación del balón, permitiéndole a Paredes concentrarse en la creación de jugadas.
Velasco, por su parte, avanzó su posición para sumarse como un delantero más, acompañando a Merentiel y Giménez en la ofensiva. Esta propuesta táctica rindió frutos de inmediato, ya que Boca se adueñó del partido desde los primeros minutos. Giménez abrió el marcador a los seis minutos y volvió a anotar a los 24, mientras que Costa selló el tercer tanto pasada la media hora de juego.
Newell’s, por el contrario, mostró serias dificultades para conectar con el juego, sin poder siquiera mantener la posesión del esférico debido a la intensa presión ejercida por los jugadores locales. Carlos González tuvo una oportunidad clara para descontar en el cierre de la primera etapa, pero su remate terminó fuera del arco.
Desde el borde de la cancha, el técnico visitante, Fabbiani, exigía mayor despliegue a sus dirigidos, pero la presión aplicada por el conjunto local resultó insuperable. En un intento por revertir el marcador, Fabbiani realizó tres cambios al inicio del segundo tiempo, entre los que destacó la entrada de Darío Benedetto, quien fue recibido con una cálida ovación por parte de la hinchada. Curiosamente, el último gol del delantero había sido durante su etapa en Boca, ya que en sus posteriores pasos por Olimpia de Paraguay, Querétaro de México y Newell’s no había logrado anotar.
Sin embargo, los cambios no surtieron efecto y Newell’s siguió sin encontrar respuestas. Incluso, Brian Aguirre, un exjugador de la institución rosarina, aumentó la ventaja al conectar de cabeza un preciso centro, estableciendo el cuarto gol para Boca. La noche de festejos se completó con el quinto tanto, obra de Blanco, quien con un potente remate de zurda perforó las piernas del arquero Espíndola.
Esta contundente victoria no solo consolida a Boca en la cima de su grupo, sino que también lo posiciona como un serio aspirante al título del torneo Clausura, gracias al sólido y brillante fútbol exhibido en la cancha.
