Tras un mensaje en redes que generó conjeturas, el piloto argentino de Alpine confirmará su identidad numérica en 2026, un símbolo cargado de historia familiar y logros personales en la máxima categoría.
La especulación sobre una posible alteración en la identidad visual de Franco Colapinto para la próxima temporada de Fórmula 1 se disipó tras conocerse que el joven piloto argentino conservará el dorsal 43 en su monoplaza. El rumor surgió a raíz de una publicación en la cuenta personal de Instagram del corredor, donde una frase ambigua despertó inquietud entre sus seguidores.
En el cierre del año, Colapinto compartió un emotivo post acompañado de imágenes y la canción “Me vas a extrañar” de Damas Gratis. El texto original rezaba: “¡Se van a extrañar las carreritas y el 43!, pero dentro de poco volvemos”. Esta línea generó inmediatamente una ola de preguntas y comentarios alarmados, con aficionados preguntando si abandonaría el número que lo ha acompañado desde su debut. Ante la reacción, el piloto, oriundo de Pilar, editó la publicación eliminando la referencia al numeral, lo que solo avivó más las dudas.
Sin embargo, puede confirmarse que no habrá cambio. La interpretación de sus palabras fue incorrecta. El dorsal 43 posee un significado profundo y sentimental para Colapinto, ya que lo utiliza en homenaje a su padre, Aníbal, quien compitió con ese mismo número en el Turismo Nacional. Su elección, además, rompió una sequía de cuatro décadas en la F1, ya que antes de su arribo a finales de 2024 con Williams, hacía 41 años que ningún piloto lo empleaba en la categoría reina. Con ello, se convirtió en el decimoquinto en la historia en portarlo.
Más allá del tributo familiar, el 43 ya ha escrito su propia página en la trayectoria del piloto. Con él, Colapinto consiguió un hito notable: convertirse en el primer corredor en sumar puntos en la Fórmula 1 con ese dorsal, gracias a una destacada octava posición en el Gran Premio de Azerbaiyán, donde aportó cuatro valiosas unidades a su equipo. La temporada 2026 se presenta ahora como una oportunidad para ampliar ese legado.
La normativa actual, que data de 2014 y fue establecida por la Federación Internacional del Automóvil (FIA) y la Formula One Management (FOM), permite a los pilotos seleccionar un número fijo para toda su carrera, con el objetivo de personalizar su imagen. La única excepción es el codiciado “1”, reservado para el campeón mundial vigente. A partir de 2026, se introducirá una nueva flexibilidad: los corredores podrán cambiar su dorsal si así lo desean, siempre que escojan uno disponible y se comprometan a usarlo por al menos dos temporadas. Este contexto alimentó inicialmente la hipótesis del cambio.
Tras concluir un año 2025 sin puntos y con su continuidad en Alpine ya asegurada para la próxima campaña, Colapinto se enfoca en la preparación. Después de un período de descanso en Argentina, retornará a la fábrica de la escudería en Enstone a inicios de enero. La previa incluirá ensayos privados en el circuito de Barcelona-Cataluña, autorizados por los cambios reglamentarios, y tests oficiales en Bahréin durante febrero. El telón de la nueva temporada se levantará finalmente en Melbourne, con el Gran Premio de Australia programado para marzo.
Así, el 43 seguirá siendo un símbolo de identidad y memoria en la grilla, un número que vincula el pasado familiar con las aspiraciones futuras de un piloto decidido a dejar su huella.
