Todo se originó a fines de la semana pasada luego de que el gobierno de Sebastián Piñera decidiera aumentar el precio del transporte público, que pasó de 800 a 830 pesos (un equivalente a 1,7 dólares). Los primeros en mostrar su malestar con las medidas empleadas fueron los estudiantes universitarios, que decidieron ingresar a los subtes sin pagar y levantar las barras de acceso para que el resto de los ciudadanos ingrese de manera gratuita.
La temperatura empezó a elevarse con el transcurso de las horas del día viernes, al generarse los primeros disturbios y con el apoyo masivo de la ciudadanía que salió a las calles. Tal es así que el sábado por la madrugada el gobierno declaró el estado de emergencia que permitió que los militares salieran a las calles a reprimir impunemente, el gobierno asegura que fue para poner orden y preservar a los ciudadanos.
CIFRAS QUE ALARMAN
Para el operativo de orden y control empleado por el gobierno se desplegaron más de 9500 efectivos entre militares y policías, se registraron más de 300 heridos y al menos 13 muertos, cifra que ira aumentando debido a la gravedad de la situación en distintos puntos del país, que incluyen saqueos, incendios intencionales y represión a niños, mujeres y adultos mayores.
Si bien Sebastián Piñera dio marcha atrás con el aumento de transporte público, esto no cesó con la protesta en las calles que se extendieron el día domingo a Santiago de Chile, Valparaíso y Concepción. Esto llevo a extender el toque de queda en la región metropolitana de Santiago desde las 19 horas hasta las 6 de la mañana. En algunas ciudades la gente sale igual a la calle, con cacerolas y bocinazos. Los medios hegemónicos muestran desmanes “Caos e incendios”, titulan y blindan al gobierno.
PROTESTAS EN ARGENTINA
El día de ayer manifestantes se dirigieron al consulado de Chile en Buenos Aires a mostrar su disconformidad con la situación que se vive en el país vecino. Si bien la protesta fue de manera pacífica se registraron algunos incidentes con periodistas que estaban realizando la cobertura del acto.
En Río Grande también expresaron su solidaridad con las manifestaciones que impulsa la comunidad chilena en su país. Fue frente al consulado chileno ubicado en la esquina de Belgrano y Mackinlay.
La marcha fue convocada por la Multisectorial por los Derechos Humanos, integrantes del centro de estudiantes de la UNTDF, la colectiva feminista “Féminas al Viento” entre otros.
En el lugar se leyó un documento en el que entre otras cosas solicitan el “Fin del Estado de Emergencia que pretende criminalizar las demandas y necesidades sociales del pueblo chileno. Retiro inmediato de las Fuerzas Armadas de las calles y fin de la represión violenta a nuestras familias”.