Karen Reichardt, aspirante a diputada nacional, generó un fuerte rechazo en la oposición al calificar como «enfermos mentales» a los votantes del peronismo y kirchnerismo. Desde Unión por la Patria tildaron sus palabras de «crueles» y denuncian un intento previo de debilitar las políticas de salud mental.
La candidata a diputada nacional por La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires, Karen Reichardt, provocó un extendido repudio dentro de la escena política tras realizar graves afirmaciones sobre el electorado peronista y kirchnerista. En una entrevista radial que luego reiteró en sus redes sociales, la postulante manifestó que quienes apoyan a estas fuerzas políticas “padecen una enfermedad mental”.
La declaración no tardó en desencadenar un fuerte rechazo entre los referentes opositores, quienes condenaron sus palabras por considerarlas ofensivas e irresponsables. Desde Unión por la Patria señalaron que “banalizar los padecimientos de salud mental resulta sumamente cruel y refleja un desconocimiento profundo sobre la materia”.
Asimismo, se recordó que, durante la discusión de la Ley bases, el espacio que lidera Javier Milei, junto con Federico Sturzenegger, había propuesto inicialmente la derogación de la ley de salud mental y el cierre del Hospital Bonaparte. Esta circunstancia fue destacada por el diputado Pablo Yedlin, quien subrayó la contradicción entre las declaraciones de Reichardt y las iniciativas legislativas que su propio espacio había impulsado.
La controversia generada enciende nuevamente el debate sobre los límites del discurso político y la estigmatización de personas con trastornos psicológicos, poniendo en evidencia las tensiones en un clima electoral ya de por sí polarizado.
