El portal web La García publicó hoy que, fiscales y policías de la provincia de Chubut participaron de un entramado mafioso para reprimir a los nativos del Pu lof Cushamen.
En una nota publicada por el mismo se expresa que durante una nueva audiencia por el juicio de usurpación contra la comunidad Pu Lof, prestó declaración el cuerpo de policía de la Provincia de Chubut, ratificando el nivel de violencia y ensañamiento con el que arremetieron a los miembros de dicha comunidad, en el enfrentamiento por la recuperación de las tierras, en marzo de 2015. Asimismo, surgieron nuevas vinculaciones con los servicios de inteligencia que participaron de dicho suceso.
El subcomisario Toro de la comisaria de Lequelé, ante el interrogatorio producido por la defensa, confesó “Cuando nos vimos superados en número, sacamos nuestras armas reglamentarias y disparamos”. Agregó que las balas 9 mm eran parte del paisaje cotidiano para la comunidad, dando veracidad al relato de los Pu Lof sobre los disparos con armas de dicho calibre. Los impactos de los proyectiles incrustados en la madera podían verse en la vieja guardia (RN 40 y ex 40) como así también, en la nueva guardia lugar por donde ingresó Gendarmería el 1 de agosto de 2017.
Cabe destacar que de esta última no quedan registros, debido a que la misma fue incendiada, llevándose el fuego evidencias de diversas represiones hacia la comunidad, como las del 10 y 11 de enero del año 2017. Desde la comunidad se acusa a los puesteros de Benetton por dicho ilícito, debido a que el incendio tuvo lugar el día previo a una inspección ocular del territorio.
José Luis Santillán, miembro de la división de investigaciones de la policía de Chubut, también se presentó a declarar. Este oficial, figura como uno de los policías que mantenía contacto con Dante Claudio Giménez, agente de la ex SIDE, quien mantuvo contacto con varios efectivos policiales de la Pcia. de Chubut, con la excusa de la recuperación territorial de las tierras ocupadas por Benetton. Recopilando información para ellos y entregandola a los fiscales María Bottini y Fernando Rivarola, investigados por haber utilizado información ilegal.
Concluye haciendo inferencia, en base a las declaraciones ocurridas en el juicio y en la audiencia por la causa de espionaje de Bottini y Rivarola, que el ex SIDE brindaba sus servicios las policías de Chubut, quienes a su vez trabajaban para defender los intereses de Benetton.
Las declaraciones en sede judicial, dan pie a la apertura de una nueva investigación respecto de las responsabilidades en la represión sobre el pueblo Mapuche en la que más policías y funcionarios judiciales deberán comparecer ente la justicia.