El almirante Alvin Holsey, sucesor de Laura Richardson, arribará a Tierra del Fuego para continuar con las gestiones sobre la instalación conjunta de una base naval estratégica en el Atlántico Sur. El proyecto había generado controversia por posibles vínculos con China y Rusia en su etapa inicial.
Ushuaia vuelve al centro de la geopolítica regional con la visita del jefe del Comando Sur de Estados Unidos, Alvin Holsey, quien arribará este miércoles a la capital fueguina para interiorizarse sobre los avances en el plan de creación de una Base Naval Integrada, un ambicioso emprendimiento estratégico impulsado por el Gobierno argentino en colaboración con Washington.
La llegada del almirante norteamericano se da exactamente un año después del anuncio oficial realizado en la misma ciudad por el presidente Javier Milei, en un acto conjunto con la entonces jefa del Comando Sur, Laura Richardson. En aquella oportunidad, el mandatario había destacado la relevancia del enclave proyectado en Ushuaia como “la nueva puerta de entrada hacia la Antártida”, en una iniciativa que apunta tanto al desarrollo local como al fortalecimiento de la alianza bilateral en materia de defensa.
Holsey aterrizará en Ushuaia cerca del mediodía del miércoles, tras partir desde la ciudad de Buenos Aires a primera hora. Su agenda incluye una recorrida por las instalaciones de la Armada en el Área Naval Austral, una región que cumple funciones clave como el patrullaje del mar argentino, tareas de rescate en alta mar y control del tráfico en el estratégico Canal de Beagle. Será recibido con honores militares por autoridades castrenses locales, mientras que aún se desconoce qué funcionarios del gobierno argentino participarán del acto, ya que el presidente Milei estará abocado a otras actividades en la capital nacional.
Un proyecto con historia y giros diplomáticos
El desarrollo de la Base Naval Integrada comenzó a tomar forma en 2022, bajo la gestión del entonces ministro de Defensa Jorge Taiana, quien encargó al astillero Tandanor el diseño y la ejecución de la obra. En ese momento, trascendió que existían negociaciones incipientes con potencias como China y Rusia para financiar y operar el establecimiento, lo que generó preocupación en ámbitos diplomáticos occidentales.
La llegada de Milei al poder en diciembre de 2023 marcó un viraje drástico en la política exterior. En sintonía con su visión alineada a Estados Unidos, el nuevo jefe de Estado dejó atrás las negociaciones con Beijing y Moscú, y priorizó el fortalecimiento del vínculo estratégico con Washington. Así, el proyecto fue rescatado de su estancamiento y reposicionado como un emblema de cooperación bilateral.
Durante su visita del año pasado, Richardson había destacado la importancia del trabajo conjunto: “Estamos comprometidos a cooperar estrechamente con Argentina para que nuestros esfuerzos en materia de seguridad beneficien a nuestros pueblos y a todo el continente de manera sostenida”, afirmó.
Un centro logístico clave para el Atlántico Sur
La infraestructura proyectada en Ushuaia pretende transformarse en el centro logístico más cercano al continente antártico. Según declaraciones oficiales, brindará servicios esenciales para el reabastecimiento y reparación de embarcaciones científicas, turísticas y comerciales que operan en el Atlántico Sur. También funcionará como apoyo a las misiones antárticas internacionales, promoviendo tanto la ciencia como la actividad económica en la región.
“Permitirá que buques nacionales y extranjeros encuentren en Ushuaia un punto de asistencia estratégica antes de continuar su travesía hacia el continente blanco”, detalló el propio Milei en su discurso de 2024. Además, se espera que el proyecto dinamice la economía local, genere empleo y posicione a Argentina como un actor central en el escenario geopolítico del hemisferio sur.
Un nuevo capítulo en la relación bilateral
En la antesala de la visita a Ushuaia, Holsey fue recibido por el presidente Milei en la Casa Rosada, en compañía del ministro de Defensa, Luis Petri, y miembros de la delegación estadounidense. En ese encuentro, se ratificó la voluntad mutua de profundizar la alianza en temas sensibles como defensa, comercio y lucha contra el crimen transnacional.
“Estamos atravesando una etapa de gran entendimiento con Estados Unidos. Esta visita es histórica y confirma el camino compartido que hemos emprendido”, destacó Petri en sus redes sociales. El funcionario agregó que ambos países buscan consolidar a la Argentina como “socio estratégico, confiable y activo en la promoción de la democracia y la estabilidad regional”.
El almirante Holsey no estará solo en su recorrido por el sur argentino. Lo acompañarán la encargada de negocios de la Embajada de Estados Unidos en Buenos Aires, Abigail Dressel, y el Mayor General Julian Cheater, director de Estrategia y Políticas del Comando Sur. La delegación partirá de regreso a la capital nacional luego del mediodía y descansará allí antes de volar hacia Miami al día siguiente, dando por finalizada su misión en el país.
