inflación en agosto: expectativa de un índice menor al 2%

inflación en agosto: expectativa de un índice menor al 2%

Analistas privados anticipan que el IPC habría registrado una suba cercana al 1,7%, impulsado por vivienda y combustibles pero moderado por alimentos. La volatilidad cambiaria y las tarifas se perfilan como factores clave para los próximos meses.

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) dará a conocer esta tarde el esperado dato del Índice de Precios al Consumidor (IPC) correspondiente al mes de agosto. El conjunto del mercado anticipa una moderación en el ritmo inflacionario, que mostraría una leve pero significativa desaceleración si se la compara con el registro de julio. Este fenómeno se desarrolla en un escenario económico complejo, signado por la inestabilidad en el tipo de cambio, la proximidad de los comicios nacionales y el impacto residual de las actualizaciones en los precios bajo regulación estatal.

Diversas consultoras especializadas, a través de sus estimaciones preliminares divulgadas en los últimos días, ofrecen un panorama aproximado de la cifra que oficializará el organismo estadístico. Desde C&T Asesores Económicos se proyectó que la inflación mensual se habría situado en el orden del 1,6%. Su análisis destaca que el capítulo de vivienda, agua, electricidad y gas constituyó el factor de mayor incidencia, explicando más de la mitad de la suba general. No obstante, el resultado global exhibiría un marcado freno con relación al mes previo.

En sintonía con esa perspectiva, la fundación Libertad y Progreso calculó un incremento del 1,7% para el nivel general de precios. Su informe subraya que esta moderación obedeció, fundamentalmente, a la estabilización de varios bienes de consumo masivo y a leves retrocesos en algunos productos frescos de la canasta alimentaria, un comportamiento que logró atenuar los efectos de la presión cambiaria y de los ajustes en los servicios públicos.

Por su parte, la consultora Analytica estimó una desaceleración aún más pronunciada, con una variación del 1,8%. La firma precisó que el indicador fue impulsado principalmente por alzas en educación y en los precios de los combustibles, a la vez que se vio considerablemente moderado por el favorable comportamiento de los alimentos. En todos los casos, las mediciones privadas coinciden en señalar un claro enfriamiento respecto de julio, cuando el Indec había informado una suba del 1,9%.

Un indicador adicional, que suele considerarse un termómetro de la tendencia nacional, lo proporcionó el Instituto de Estadística de la Ciudad de Buenos Aires. Su medición local arrojó que el costo de vida en la capital avanzó un 1,6% en el octavo mes del año, acumulando así un 37,4% interanual. En el acumulado de los primeros ocho meses de 2025, la inflación porteña ya alcanza el 20%. Los rubros que mostraron las subas más significativas fueron salud, con un robusto 3,8%, y educación, que aumentó un 2,1%. El transporte registró una variación mensual del 3%. En el extremo opuesto, alimentos y bebidas no alcohólicas presentaron una mínima suba del 1%, actuando como el principal factor de contención del índice.

Las proyecciones no se limitan al mes pasado. El último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), elaborado por el Banco Central sobre la base de consultas a especialistas, prevé una desaceleración progresiva de los precios en el corto plazo. Los analistas participantes estiman para agosto un 2,1%, anticipando para septiembre una suba del 1,8% y para octubre del 1,7%. Para cerrar el año, la previsión medianamente consensuada sitúa la inflación anual en un 28,2%.

Los expertos advierten, sin embargo, que la futura dinámica de los precios dependerá críticamente de la evolución del dólar, de las decisiones sobre precios regulados y de las medidas de política económica que adopte el gobierno en la etapa final del proceso electoral. La reciente volatilidad cambiaria, sumada al fantasma de nuevos ajustes en combustibles y tarifas de servicios, podría reintroducir presiones inflacionarias en el inmediato plazo. Cabe destacar que estas proyecciones fueron realizadas con anterioridad a los comicios bonaerenses y al posterior salto del dólar oficial por encima de la barrera de los $1.400, un elemento nuevo que introduce un alto grado de incertidumbre en el escenario por venir.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

32k